La Clínica Universidad de Navarra incorpora el modelo más avanzado de ultrasonidos de alta intensidad HIFU para el tratamiento de pacientes con temblor esencial y el temblor, rigidez y torpeza que aparecen en la enfermedad de Parkinson.
En la gran mayoría de los casos, de forma inmediata el temblor mejora, un efecto del que el paciente se beneficia en una sola sesión.*
Más de 250 intervenciones con HIFU hasta hoy, de los que 92 son pacientes de Parkinson.
Al ser un procedimiento no invasivo, no necesita ingreso previo y, tras la sesión el paciente recibe el alta en 24 horas. Como en cualquier tratamiento, pueden aparecer efectos secundarios que, en la mayoría de los casos, suelen resolverse en pocas semanas.
Un mes después el paciente volverá a revisión y, a partir de ese momento, se determinará el seguimiento que requiere por parte de los especialistas
¿Soy un buen candidato para realizar el HIFU?
La aplicación de esta técnica se dirige al temblor esencial y del Parkinson y también para tratamiento de otros síntomas del Parkinson como la rigidez o la lentitud.
El paciente debe ser evaluado en consulta por un neurólogo para determinar si es candidato o no a este procedimiento.
El procedimiento se aplica unilateralmente, con lo que el beneficio se obtiene sobre el lado del cuerpo más afectado.
En términos generales, quienes podrían ser candidatos son:
- Pacientes en los que el temblor y otros síntomas tienen una respuesta parcial al tratamiento.
- Pacientes que, por su estado de salud, edad… no son candidatos a la cirugía.
¿Cómo se realiza el HIFU?
Como una lupa en la que convergen los rayos de sol para concentrar el calor en un punto. Así actúa el equipamiento de ultrasonidos enfocados de alta intensidad HIFU. Una tecnología que capta el calor de miles de haces de ultrasonidos y los concentra en una diana: el grupo de neuronas comprometidas en el temblor.
Se trata de un procedimiento no invasivo que no necesita realizarse en quirófano, sino que se lleva a cabo en la sala de exploración de la resonancia magnética. En ella, el paciente está despierto y tan solo se le coloca un marco de esterotaxia en la cabeza y una membrana de silicona que contiene agua para refrigerar y no dañar la piel.
Localizada la diana quirúrgica en la resonancia, el neurocirujano comienza a aplicar los ultrasonidos que se irán incrementando en intensidad, en función de la mejoría del paciente, hasta conseguir el máximo efecto posible.
¿Cómo es el proceso del tratamiento del temblor con HIFU?
Fase 1 :
- Consulta con el especialista en Neurología.
- Realización de una TAC craneal.
- Consulta con el especialista en Neurocirugía.
Fase 2 :
- Preparación del paciente.
- Procedimiento HIFU.
- Según la evolución del paciente se realizará una resonancia magnética al cabo de unos meses.
Fase 3 :
- Nuestros profesionales realizarán un seguimiento personalizado con una revisión al mes, a los 3 y a los 6 meses, en la que se le indicarán las pautas a seguir.